Los pies son la base de sustentación de nuestro maravilloso cuerpo, sea en movimiento o de manera estática, nos brindan la suficiente estabilidad para adaptarnos a superficies irregulares, así como la amortiguación necesaria ante los impactos al momento de caminar o correr. Si bien el cuidar del buen funcionamiento del pie depende en gran parte de nosotros mismos, al conocer su función, sabremos cuándo pisamos de manera adecuada o cuándo necesitamos hacer correcciones. Por lo tanto, el explorar tus pies y tu calzado te abrirá una ventana de información que te ayudará a saber si pisas de forma correcta o no.
¿Cómo debo explorar mis pies para detectar una mala pisada?
¿Cuál es la manera correcta de pisar?
Arco lateral
Arco medial
Arco transversal.
Pisada pronada: Puntos de carga en toda la planta del pie con dirección hacia adentro, de igual manera talón y tobillo se direccionan hacia adentro.
Pisada supinada: Puntos de carga únicamente en talón y antepié, toda la parte media del pie no presenta ningún contacto. Talón y tobillo con dirección hacia afuera.
La marcha puede llegar a alterarse en las diversas etapas de crecimiento del niño, entonces, ¿es normal que mi hijo tenga un caminado con sus pies hacia adentro o en puntas?
Hay diversos factores que nos pueden ocasionar que alguna fase de marcha no se esté realizado correctamente, por ejemplo; una pisada pronadora o supinadora, patologías como pies planos, pies cavos, dedos en garra, hallux valgus, el uso de un calzado ajustado, uso de tacones, entre otros; son factores que contribuyen a fases de marcha alteradas que en la mayoría de los casos terminan en cuadros de dolor e inflamación.
La marcha puede llegar a alterarse en las diversas etapas de crecimiento del niño, entonces, ¿es normal que mi hijo tenga un caminado con sus pies hacia adentro o en puntas?
La realidad es que este tipo de marcha es idiopática y esporádica. Puede llegar a estar presente de los 2 años a los 3 años de edad y posteriormente quitarse sin complicaciones. Al ser idiopática se desconoce realmente una causa exacta, pero las posibles causas se relacionan con el mismo desarrollo del niño, la morfología del pie, disfunción de la integración sensorial o incluso se relaciona con problemas de la vista.
¿Cuándo debo preocuparme por la pisada de mis hijos?
Así como aparecen estos patrones, de igual manera deben quitarse. Es importante acudir con el especialista que valorará la pisada del niño mediante exploraciones y estudios de la marcha. Ya que el caminar en puntas puede llegar a ocasionar acortamientos del tendón de Aquiles, sobrecargas metatarsales o trastornos musculares. Por otro lado, la marcha con los pies hacia adentro puede ocasionar intrarotaciones articulares que ocasionen caídas frecuentes y, en un futuro, puede traerle problemas posturales que terminarán en su mayoría en cuadros de inflamación y dolor.
¿Es posible corregir estos tipos de marcha? ¿Necesito operar a mi hijo?
Los pies de un niño son sumamente adaptables y en la mayoría de los casos son capaces de poder corregir estos tipos de marcha sin necesidad de tratamientos invasivos como las cirugías. Teniendo una correcta valoración, así como un tratamiento complementario en plantillas ortopédicas, ejercicios terapéuticos, actividades físicas y calzado adecuado, lograremos que nuestros hijos pisen y caminen de una manera adecuada.
En Piédica contamos con la tecnología que nos permite realizar un diagnóstico acertado a través de estudios baropodométricos y la fabricación de plantillas personalizadas según las necesidades de cada problema. Agenda tu cita en la sucursal más cercana.
Autor: Areli Casillas García
Lic. En Terapia Física
Especialista en Baropodometría
Sucursal Piédica López Mateos Sur